El consumo Colaborativo como creador de vi¦ünculos sociales Lazos sociales returns

Compartir coche como en Amovens, alquilar coche entre particulares en SocialCar, intercambiar y compartir alojamiento o viajes, como podemos hacer en Airbnb y minube respectivamente, encontrar habitación en pisos compartidos en habitoom, descubrir la compra en grupo de alimentos sin intermediarios en lacolmenaquedicesi, intercambiar todo tipo de objetos como podemos hacer en Obsso, compartir espacios de trabajo en Coworkingspain, hacer turismo de experiencias como hacen nuestros amigos de Sherpandipity o recolectar dinero para diversas causar con Kolecta, o también compartir conocimientos en Tutellus, …

El elemento común a todas estas iniciativas de Consumo Colaborativo es internet. Las conocemos y nos conectamos  a ellas de forma online, pero después  compartimos nuestras grandes experiencias colaborativas en la vida real. Por ello son tan grandes, de una pequeña idea, realmente, poco a poco, podemos concienciar y cambiar el mundo.

Hoy en día, están resurgiendo los lazos sociales y la colaboración. Elementos que la sociedad de consumo y el individualismo han ido consumiendo, hasta casi su extinción. Esta dimensión social es también en gran parte lo que explica el éxito de las plataformas de consumo colaborativo. De este modo, el consumo colaborativo está en auge, y viene para quedarse.

Los usuarios que utilizan las distintas plataformas de Consumo Colaborativo, como las que hemos citado hace un momento,  crean piñas y comunidad dentro de ellas, y su capacidad para ayudar a los demás y participar justamente, son valoradas postivamente por el resto de usuarios.

El gran ejemplo es el sistema de valoración de usuarios de Ebay, que ha sido emulado por el resto páginas y proyectos de Consumo Colaborativo. Estos sistemas de reputación, están bien desarrollados, y gracias a ellos, la confianza entre las personas que no se conocen entre sí, asciende de manera notable dentro de las comunidades de usuarios.

Lo fundamental es la confianza dentro de una comunidad, ya que gracias a ella, se harán posibles las interacciones.

Sin confianza, no hay trato.

Rachel Botsman, autora junto a Roo Rogers en 2010 de « Lo que es mío es tuyo: el auge del consumo colaborativo », nos dice que «Nuestra participación en plataformas sociales y en las redes sociales, definen cómo nos expresamos. Nos olvidamos y salimos de la cultura del hiper-individualismo para compartir con los demás nuestra vida. Esto es lo que podemos llamar la transición de la cultura del « yo » a la cultura del « nosotros » »

La sociedad consumista, impulsa el individualismo. Por ejemplo, en zonas urbanas, donde estamos rodeados de miles de personas, en realidad parece que estamos solos. En ocasiones, no conocemos ni a nuestros vecinos.

Por supuesto, esto es perfecto para las grandes empresas, no quieren, por ejemplo, que una  herramienta, o un cargador de móvil, sean utilizados por varias personas.

No quiero hablar por ellos, pero probablemente prefieren que cada persona tenga su propia herramienta en casa … 😉 Tal vez, ellos preferirían que no pidiésemos nada prestado a nuestros vecinos.

Gracias a la economía colaborativa, el concepto de « vecino » está cambiando.

Anteriormente, la publicidad nos ha hecho ver a nuestros vecinos como personas que viven al lado de nosotros, y con los que no nos llevamos necesariamente bien. Por ejemplo, nos molestan con sus ruidos, el perro pesado que no para de ladrar, el vecino rico que tiene un cochazo y nos da envidia…

El consumo colaborativo rompe con esa idea. El mundo entero puede ser tu vecino.

Gracias a estas nuevas herramientas tecnológicas de consumo colaborativo, el barrio ya no es un simple concepto geográfico, sino un sistema de valores compartidos, que transforma a todos los usuarios de las herramientas colaborativas, en « buenos vecinos ».

Eso es lo que precisamente tratamos de hacer con Helpy, una comunidad solidaria, o más bien una comunidad dispuesta a servir en cualquier lugar y en cualquier momento los usuarios, a los « vecinos ».

Así que no lo pienses más y únete a nosotros.

La aplicación es gratuita y está disponible en Android y iOS.